En el año 2008, cuando Henri Falcón ganó la gobernación de Lara por vez primera, con un 85% de los votos, suma de chavistas y opositores (el único en todo el país), a un amigo mío, que es comunista le consulté su opinión sobre éste fenómeno. Su respuesta fue la que menos esperaba:
"Henri Falcón no es revolucionario y nunca lo ha sido, no lo acepto". Allí quedó la conversa y mi extrañeza sólo se resolvió cuando HF abandonó a hugo chávez y se hizo parte de la oposición...a su estilo.
Y así ha sido desde entonces. Fue jefe de campaña en 2013 de Henrique Capriles y de no ser por la trampa que fue aplicada por el CNE y los esbirros en cárceles y centros militares, más el engaño nacional (éste último ha desaparecido), sumando el corte de Internet que hubo a las 5pm del 14 de abril de 2013 alegando que habían hackeado a nicolás maduro, el señor Falcón hubiese llevado a la oposición al triunfo y su nombre estaría muy alto. Pero...
Su insistencia en no ser ecuánime y certero en sus declaraciones, su empeño en estar bien con Dios y con el diablo y no lograrlo en sus declaraciones, tener un plan de trabajo anacrónico, de oficina, siendo extraño ya que como gobernador llegó a patear calle. No poder conectarse con el discurso de la Unidad y de sus voceros de manera contundente, siempre dejando un esquicio donde quisiera darnos a entender que debemos darle la oportunidad a maduro de redimirse, un acto por demás imposible ya que el daño socioeconómico a la nación es irreversible y maduro se encarga de alimentarlo a diario con una ineptitud más que supina, gozosa. Como todo aquel que está enloquecido de poder y confiado de ser imbatible, en especial por un pueblo que suma hasta quienes lo apoyaron, por creer, por atender solicitud, por error, por obligación y hasta por pago de votos.
Henri Falcón no tiene el feeling para gobernar ni ser candidato presidencial, igual que Manuel Rosales. Ambos no tienen un plan de acción unitario, firme, coherente, acorde a la necesidad de no venganza pero sí de mucha justicia y de inversión foránea, junto con la recuperación de miles de millones robados que podrían hacer una acción de renacimiento en un semestre (un arranque).
Pese a no tener feeling, tiene la ventaja de las inhabilitaciones que no ha sabido atacar. Se suma su actitud aguada y obscena ante los ataques de grupos Colectivos que no son más que órganos Delictivos del psuv junto a PNB y GNB.
Muchos dudamos que gane unas primarias a presidenciales, sólo podría repetir en su Estado Lara. Por ello mi recomendación es no prestarle más atención, el foco es el psuv por completo, ese psuv que destruyó la fe de sus seguidores y nos demostró que no estabamos equivocados. Ningún ignorante y desconectado con el pueblo, ese que pide ser tratado como ciudadano, puede ser Presidente.
Él se hace cada día menos creíble y las acciones de sus seguidores, lamentablemente no lo ayudan. Su partido fue renovado, pero la fe en él, no existe del todo. Basado en aquello que llaman "guabineo" y su muy mal uso del significado y significante, en especial cuando hay tanta sensibilidad social que roza con la rabia.
Sólo queda tenerlo no como presidenciable ni referencia, pero jamas de enemigo. Lo he dicho miles de veces, hay que diferenciar entre chavistas y maduristas. Los chavistas sí le dan una oportunidad a la oposición, el madurista no. Es hora de sumar y mejorar la cuenta a favor del país. Cuando haya democracia plena, se hacen las evaluaciones a fondo, sin presunción, venganza ni parcialidad. O seremos lo mismo que criticamos.
"Henri Falcón no es revolucionario y nunca lo ha sido, no lo acepto". Allí quedó la conversa y mi extrañeza sólo se resolvió cuando HF abandonó a hugo chávez y se hizo parte de la oposición...a su estilo.
Y así ha sido desde entonces. Fue jefe de campaña en 2013 de Henrique Capriles y de no ser por la trampa que fue aplicada por el CNE y los esbirros en cárceles y centros militares, más el engaño nacional (éste último ha desaparecido), sumando el corte de Internet que hubo a las 5pm del 14 de abril de 2013 alegando que habían hackeado a nicolás maduro, el señor Falcón hubiese llevado a la oposición al triunfo y su nombre estaría muy alto. Pero...
Su insistencia en no ser ecuánime y certero en sus declaraciones, su empeño en estar bien con Dios y con el diablo y no lograrlo en sus declaraciones, tener un plan de trabajo anacrónico, de oficina, siendo extraño ya que como gobernador llegó a patear calle. No poder conectarse con el discurso de la Unidad y de sus voceros de manera contundente, siempre dejando un esquicio donde quisiera darnos a entender que debemos darle la oportunidad a maduro de redimirse, un acto por demás imposible ya que el daño socioeconómico a la nación es irreversible y maduro se encarga de alimentarlo a diario con una ineptitud más que supina, gozosa. Como todo aquel que está enloquecido de poder y confiado de ser imbatible, en especial por un pueblo que suma hasta quienes lo apoyaron, por creer, por atender solicitud, por error, por obligación y hasta por pago de votos.
Henri Falcón no tiene el feeling para gobernar ni ser candidato presidencial, igual que Manuel Rosales. Ambos no tienen un plan de acción unitario, firme, coherente, acorde a la necesidad de no venganza pero sí de mucha justicia y de inversión foránea, junto con la recuperación de miles de millones robados que podrían hacer una acción de renacimiento en un semestre (un arranque).
Pese a no tener feeling, tiene la ventaja de las inhabilitaciones que no ha sabido atacar. Se suma su actitud aguada y obscena ante los ataques de grupos Colectivos que no son más que órganos Delictivos del psuv junto a PNB y GNB.
Muchos dudamos que gane unas primarias a presidenciales, sólo podría repetir en su Estado Lara. Por ello mi recomendación es no prestarle más atención, el foco es el psuv por completo, ese psuv que destruyó la fe de sus seguidores y nos demostró que no estabamos equivocados. Ningún ignorante y desconectado con el pueblo, ese que pide ser tratado como ciudadano, puede ser Presidente.
Él se hace cada día menos creíble y las acciones de sus seguidores, lamentablemente no lo ayudan. Su partido fue renovado, pero la fe en él, no existe del todo. Basado en aquello que llaman "guabineo" y su muy mal uso del significado y significante, en especial cuando hay tanta sensibilidad social que roza con la rabia.
Sólo queda tenerlo no como presidenciable ni referencia, pero jamas de enemigo. Lo he dicho miles de veces, hay que diferenciar entre chavistas y maduristas. Los chavistas sí le dan una oportunidad a la oposición, el madurista no. Es hora de sumar y mejorar la cuenta a favor del país. Cuando haya democracia plena, se hacen las evaluaciones a fondo, sin presunción, venganza ni parcialidad. O seremos lo mismo que criticamos.
