Pocas son las empresas que no se han lanzado todavía a conquistar al mercado infantil con sus tabletas. Los tablets que quieren hacerse con los adultos (el mercado al que están destinadas al fin y al cabo y dónde se pueden encontrar los ingresos gracias a las múltiples fuentes de ingresos asociadas a la venta de contenidos) emplean como arma el control parental. Los padres pueden dejar a sus niños jugar con su iPad o su Kindle Fire o su tableta Android (añádase aquí cualquier modelo de los muchos que existen) porque podrán limitar el acceso a los contenidos que ven sus hijos. Pero para aquellos que quieren que sus hijos tengan una tableta propia, o para aquellos niños que no quieren compartir con nadie, hay una amplísima variedad de opciones.
SuperPaquito, la tableta de Imaginarium, fue una de las primeras en presentarse al mercado. La prensa especializada fue convocada en masa, fueron recibidos por un mago y escucharon las bondades de este dispositivo. Cuenta con una versión adaptada de Android, con una interfaz al gusto de los más pequeños, con contenidos educativos y con todo el control parental que los progenitores puedan desear. Técnicamente, el terminal aporta una pantalla de 9,7 pulgadas, con cámara frontal y trasera, 1 GB de RAM y procesador Cortex A8 a 1 GHz. ¿Una tableta lo suficientemente brillante para los niños? Su precio, 299 euros, la pone por encima de las propuestas más económicas de tabletas para adultos.
Esta cantidad pone a SuperPaquito por encima de los otros tablets infantiles. Toy’s'r’Us acaba de lanzar Tabeo, al menos en Estados Unidos, por 149,99 dólares. Como SuperPaquito, Tabeo también echa mano de Android como sistema operativo y llegará con 50 libros precargados.
Clan TV, el canal infantil de RTVE, también cuenta con una tableta propia para sus jóvenes telespectadores. La tableta de Clan tiene Android 4.0 como sistema operativo, reproduce vídeo HD, conexión WiFi y un control parental “avanzado”, que permite establecer hasta ocho perfiles de usuario en cada dispositivo. Los padres también pueden limitar el número de veces que los niños acceden a la tableta y el tiempo que le dedican a sus contenidos en cada conexión.
A medida que las fechas navideñas se van acercando es de esperar que los fabricantes y distribuidores se lancen a presentar más tabletas para niños. La última en llegar viene de la mano de Mattel e Ingo Devices, que emplean una de las franquicias de más éxito de la primera para convencer a los niños de que esa es su tableta.
Las Monster High son quienes respaldan esta tableta, que cuenta con Android 4.0 como sistema operativo, pantalla de siete pulgadas, cámara frontal, filtro de contenidos, 4 GB de memoria interna y “un diseño monstruosamente fashion”. De serie viene con contenido asociado a las Monster High. Suprecio: 99,90 euros.