Y es que el lanzador Francisco Buttó ha demostrado en reiteradas ocasiones que ya no está a la altura de la presión que se ejerce en un cerrador de equipo. Su descontrol al lanzar, la ansiedad que se lee en su cara, su falta de decisión y "maña" para poder solventar, lo hacen un lastre para el equipo.
El juego del día 23-10-2011 fue el colofón. Ya temíamos que se tiraría el No Hit No Run que se le estaba propinando a Navegantes del Magallanes, algo que a mi parecer es un logro notable pero no en extremo necesario, tanto como el triunfo. Por segunda vez él se "tira" un blanqueo sin carreras por no soportar la presión, el legado de responsabilidad.
Su amigo y colega Víctor Moreno quien a veces tiene sus días malos como todos, posee mayor dominio, maña, hasta lo que se requiere para el espectáculo, ser show. Hace muchas temporadas atrás que Buttó dejó de ser ello.
La gran pregunta de la afición es ¿por que el manager Buddy Bailey siempre "la pone de oro" confiando en él? Realmente no hay respuesta, pero es hora de que la dé. Estadísticamente Buttó ha demostrado un descontrol e ineficacia superior a sus éxitos. Psicológicamente la presión lo domina. Es injusto que los seguidores de los Tigres de Aragua vayan con pesar y "blasfemias a flor de piel" con sólo pensar que Buttó va a cerrar un juego.
Ya hay hasta chismes de pasillo que dan mala espina al equipom, de que mister Bailey es pareja de una familiar de Buttó, lo que hace más difícil salir u obviar al "cuñado". Comentarios así desprestigiaron la labor de Luis Sojo con su compadre Robert Pérez y para nada ayudan a la carrera de un jugador, aunque dé jonrones a diario o saque 12 ponchados.
Otros comentarios son más directos, a los cuales no haré referencia directa, pero sí es de destacar que acrecientan la molestia del fanático.
Cuando los pitchers están bien, mister Bailey los saca; sí están mal, los deja. ¿es para inyectarles confianza? Eso no ayuda. Su fórmula ha sido ganadora, pero todo es mejorable y más sí estás socavando la confianza de la afición que te ha respetado. Es hora de hacerle un acomodo a su línea de trabajo, dejar que los pitchers muestren su potencial. Porque así es que trabajan los líderes, dejando oportunidades.
Y si Buttó no es sacado del equipo, al menos hay que quitarle ese cargo de cerrador. Los hechos hablan por sí solo. Y no me vengan los expertos con aquello de "lo que ha demostrado antes". Señores, las fallas también hablan e indican que hay que cambiar. O lo cambian de equipo (cosa difícil de creer porque nadie lo tomaría) o lo colocan de relevo intermedio, cosa que otros puedan subsanar los entuertos en los que se meta o continuar los éxitos que posea.
Le solicito a todos aquellos que como yo son seguidores de los Tigres de Aragua, reenvíen la misma hasta que la directiva ponga los puntos sobre las íes, ya que esto no es algo reciente, lleva años así. Parece que Buttó es socio del cardiológico y le gusta enviar infartados al mismos. Así no se puede querer a un equipo.
Y como modo de protesta cívica, sería bueno copiar la idea de los fanáticos de los Tiburones de La Guaira el pasado año: Una bolsa de papel en la cara en caso de anunciarse a Buttó a lanzar o el negar el aplauso (la más dura crítica a una figura pública). Todo hasta que sea puesto en descanso, en relevo medio, no cierre en partidos cerrados, sea sacado en caso de falla o más drásticamente, cambiado. Ya basta de esta injusticia, están a tiempo de rectificar.
No somos perfectos, pero sí corregibles.
