Opinión de Periodistech

Pipí y Pupú.- Primero he de presentar mis disculpas ante este cuasi escatológico título, pero el mismo fue el génesis de esta opinión. Hace pocos días consulté a una maestra del Preescolar cercano a mi casa el que niños y niñas tan pequeños entraban a clases, cuando lo estimados era de tres años y medio. Me comentó que por la nueva LOE (Ley Orgánica de Educación) todo infante a partir de los 2 años y medio puede entrar al área de preescolar, que se combina con una suerte de maternal pero en el que ven las mismas actividades, acordes con su edad, proceso cognitivo y cognoscitivo y habilidades motoras.Pero ella me lo resumió con esta frase (sic) “sí saben decir pipí y pupú, están acordes para entrar al Preescolar”.
Aquí es donde salen mis preguntas: Bien, sabe decirlo pero ¿antes de o después de haberse hecho? ¿Es suficiente el saber sólo avisar para compartir?
No con esto quiero colocar en duda o tela de juicio la habilidad de los niños, más en esta época son llamados “índigos”, lo que otrora se les dijo “pilas” más el trabajo gradual en la formación harán a una persona que se adapte a los tiempos y tenga visión de futuro, no a alguien que corra temeroso de no cumplir parámetros o preceptos estipulados en cierto tiempo (graduarse, trabajar, tener familia), gran temor que han acarreado nuestras generaciones quizás por lo defectuoso del sistema educativo público y a veces el privado (más su costo).
También queda el tema de los padres, quienes muchos por “comodidad” más que por el bienestar de los niños les llevan a Preescolar para tener un tiempo libre (no, no objetaré qué hace en su tiempo libre, aunque la malicia y chispa criolla nos hace conjeturar), pero no todos o todas laboran, así que ¿por qué no compartir más con sus hijos?
A diferencia de las guarderías – maternales, que están pensadas en el cuidado integral del niño similar al de casa (alimentación, sueño, instrucción en su higiene, interactuar), en el área preescolar van directamente a la instrucción de hábitos, interacción y bases formativas quizás apresuradas y en menor tiempo, ya que un maternal funciona de 7 a 5 (o más) y los preescolares de 8 a 11:30.
La reflexión final es: Apresurar a los hijos en el mundo no garantiza que sean los mejores y más preparados, es quizás darles una invitación al stress. Todo ha de ser gradual, compartiendo con ellos y dándoles libertad de ser ellos mismos, amar lo que hacen y saber las normas cívicas para garantizar que mejoren, estén y puedan crear su ambiente ideal y sepan aportar con creces lo que con creces han recibido.


Erradicar la Pobreza.- En una nueva e incomprensible cadena (decimos esto por no haber observado que tenía un tema sólido, más pareció capricho), el Presidente de Venezuela Hugo Chávez afirmó que para el año 2019 la pobreza sería erradicada en el país.
Esto es basado en su confianza (y muchas cosas tácitas más) de que mantendrá su hegemonía para las próximas elecciones y que continuará su híbrido empastelado revolucionario. Yo creo que él sí va a repetir, dada la desunión opositora que se ha transformado en un frecuente Bla Bla y que no ha pateado barrios más que en algunas zonas de Caracas con el llamado “Radar de los Barrios” (excelente por cierto).
Yo mantengo mi posición de criticar la maldad gubernamental, la falta de libre albedrío y como dice una amiga dominicana, los “kojones (con k)” con que mujeres y hombres gobierneros espetan improperios disfrazados de legalidad. Más también reconozco las cosas buenas que están en su deber, sin darles rimbombancia, ya que esa publicidad en pro de pleitesía envanece a cualquiera y forma una coyuntura de adoración que ha sostenido al sistema y ha quitado ganas de pensar. Al pan, pan y al vino, vino.
A veces me consuelo (y conduelo) diciéndome que por su edad él (Hugo Chávez), fallecerá primero que yo y tendré tiempo de ver otras cosas. Quizás sea un vanidoso y mezquino pensar, pero no creo ser el único. Molesto sería que su relevo (si él quiere, no parece) fuese alguien como Jorge Rodríguez, Diosdado Cabello o William Lara, tres iconos de la maldad hecha gobierno (vean sus miradas).
En cambio, gente relegada y aceptada como Vielma Mora o Milton Ladera, por nombrar algunos nombres del chavismo, jamás les veremos surgir ya que tienen un don de gente que es francamente inaceptable.
¿La pobreza erradicada? El sueño de Jesucristo, pero francamente imposible, es el balance de la naturaleza; más si esas personas dejan ser pobres de espíritu, cívica, moral, valores, sentimiento y libre albedrío, sí habrá una mayor ganancia y una esperaza sólida e imbatible en el país, ya que existirá la entrega y la cohesión necesaria que Bolívar sí soñó, la verdadera unión entre hermanos.

Turismo.- Siempre recuerdo una entrevista del Observador de RCTV cuando era señal abierta en la bonita zona mirandina de El Hatillo. En ella la reportera le consultó a una jovencita cómo se mantenían las ventas en la zona artesanal, la joven le respondió que era aceptable, pero le gustaba más cuando llegaban los turistas “¡porque se les puede vender las cosas más caras!”. Siempre agradeceré haber visto eso y poder tener asidero para quejarme.
Por otro lado me da vergüenza recordar ello y que sea una realidad. El turista en Venezuela es tratado como una fábrica de dinero. Un turista acá debe correr con mucha suerte de conseguir gente de buena voluntad que les atienda y a su vez les tienda la mano, que le dé motivos para hablar bien del país y de su gente.
Hace poco un amigo taxista me refería que llevó desde Maracay a Ocumare de la Costa a una familia de tres; a los días la gente se comunicó con él para que les fuese a buscar, llevarles a Valencia y luego a Caracas. Había taxistas que les cobraban más de un millón y medio de los viejos, actuales mil quinientos bolívares por eso y mi amigo lo hizo casi por la mitad.
En el trayecto les iba explicando sucesos históricos o contemporáneos, curiosidades, etc. y doy constancia de sus conocimientos en ello. Los turistas no sólo le felicitaron, sino que llevaron su número para recomendarlo a otras personas. Cualquiera pensaría que fue una gentileza, pero fue una realidad, ya ha llevado a 2 familias referidas por esa pareja.
¿Confianza? ¿Respeto? ¿Estímulo al turismo? Sí, eso creo yo. Y si todos sin excepción los tratásemos como los hermanos de otras tierras, pese al idioma (estas familias son norteamericanas pero hablan español con fluidez) otro gallo cantaría en el país. Obligaría a la alicaída infraestructura hotelera a mejorar sus paquetes, sus entretenimientos, el potencial de poder ser quienes hospeden al mundo.
Colombia actualmente está ofreciendo un fomento al turismo realmente envidiable. Se están dando pininos demasiado tímidos con Venetur (www.venetur.gob.ve) pero sin un agrado de los coterráneos por “querer” al turista, seguiremos estancados.
En pocos años serán tanto el mundial de futbol como las olimpiadas en Brasil. A sabiendas de que los viajeros gustan de hacer largas travesías, por qué no acrecentar el poder hotelero, histórico, natural y cariño de las personas para que los que lleguen -que seguro llegarán si se les ofrece algo “duro” en publicidad mundial- puedan sentir que la puerta de Suramérica, como somos considerados, tenemos mucho que ofrecer y quizás en algunas décadas podamos albergar eventos internacionales de gran envergadura, en una tierra preparada en su infraestructura y mucho más en su gente.

Mercedes Sosa.- Mucho lamentamos la partida de tan insigne cantante, mujer, luchadora, profeta en y fuera de su tierra, con canto y acción. Reconozco que la admiré mucho, no como a Alí Primera, pues ella si se entregó a los suyos por igual y no como él que por idealista dejó a un lado a su gente, con mensajes en parábla que han sido una tristemente mala versión de La Biblia, usados de mala manera por gente sin escrupulos. De él sí puedo decir de bueno, que unía sus ahorros de lo que no cobraba con justicia y llevaba regalos a los niños en su tierra natal Paraguaná el 31 de Octubre de cada año, fecha de su cumpleaños. 
Regresando a Doña Mercedes, esta mujer con pantalones que usaba sus largas batolas, jamás despreció un escenario, estaba con la gente sin importar raza, credo, ideología, a ella le importaba más la gente, que se subliminizara, creciera, se quisiera y creyera.
En un triste ejercicio mental que he venido haciendo, caigo en cuenta al ver sus exequias que en nuestro país hace años que no se honra ni a cultores ni a políticos con tanta fuerza, como dicen los Fabulosos Cadillacs en "Matador" ¡por el simple hecho de pensar distinto!.
Se nos fue Aldemaro Romero, Otilio Galíndez, entre otros grandes y las palabras han sido mínimas, tal cual al fallecer el hombre grande de las letras Don Arturo Uslar Pietri en 2002.
Y pienso, el día que se vaya nuestra versión masculina de Mercedes Sosa (con respeto lo digo) que es el ejemplo de la venezolaneidad,Don Simón Díaz, ¿se le tratará así?, tal cual como al partir Billo Frómeta, será el pueblo quien lo llore desde lo más profundo, pero los honores que se ganó en vida y que han de ser reconocidos de lo alto, lo pongo en duda.
Y me baso en el desalojo que vivió meses atrás de sus tierras en Guárico. Ofendido, ultrajado y olvidado por entes militares y civiles que nada les conduele, sacado en silla de ruedas dado su condición de enfermo de Alzeihmer.
De corazón, espero equivocarme y no ser profeta del desastre, para nada deseo que el Tío Simón se nos vaya y menos que esté sufriendo.


Dispensen lo malo…
argenis.serrano@gmail.com