Cuando el amor tarda en llegar pero las hormonas deciden no querer esperar, muchas veces caemos en las redes de un amigo con derecho. ¿Qué son?, ¿cómo actuar frente a ellos? Acá lo descubrirás.
Los “amigos con derecho” o “amigos con beneficios” son un buen refugio ante la soledad, pero también un arma de doble filo, ya que no todos pueden mantener las reglas del “no-sentimientos”, y muchas veces se cae en el desamor, la decepción, las lágrimas y la separación. Para no caer en esa peligrosa tentación y salir lastimada, te recomendamos leas primero las cinco cosas a considerar antes de tener una aventurilla:
1. Sé honesta con tus emociones. Los “amigos con derechos a roce” son dos personas con una atracción física mutua, pero donde las emociones y sentimientos no tienen cabida. Cuando esto sucede, las cosas se complican, y si no eres sincera con él, y mucho menos contigo misma, seguramente terminarás sufriendo.
2. No debes convertir a tu amigo en amante como paso previo al noviazgo, porque eso remotamente ocurre. Recuerda que hay una diferencia entre sexo y amor, y los “amigos con derechos” solo tratan sobre sexo.
3. Supuestamente, un “amigo con derechos a roce” tiene toda la libertad de estar con otras chicas. Por eso, si eres del tipo celosa y crees que no podrás controlarlo cuando lo veas en alguna cita o conversando con otra muchacha, no te metas en esta situación.
4. Antes de comenzar una relación de este tipo, que bien sabes es solamente sexual, es recomendable establecer las reglas del juego. Una de las reglas a considerar es no integrarlo a tu rutina diaria, incluyendo los amigos y la familia. Si con el tiempo comienza a llevarse bien con ellos, la relación tomará otra tonalidad.
5. Una de los puntos más importantes que debes tener en cuenta antes de comenzar una relación netamente sexual con un amigo es el riesgo de perder la amistad. Si las cosas no resultan bien, una relación de “amigos con derechos” tiene el potencial de arruinar la amistad.
Así que ya sabes, tener un “amigo con derecho” no siempre es tan sencillo como parece y puede convertirse en una relación peligrosa.