DIPUTADOS DE ARAGUA. En específico los del CLEBA, tienen programas radiales y televisivos que no pagan, maltratan a los productores y camarógrafos y todo lo que dicen son bajezas contra todo aquel que piense distinto, con ese tono déspota y sin un ápice de conciliación que deberían tener. Esto no es raro, pero en Aragua no se veía hasta que llegó Rafael Isea, lo que se traduce como falta de impulso de la paz.
Una de ellas es la diputada Miriam Pardo que sólo atina a decir lo que ya todos hemos visto y con una semana de retraso, con una entonación aburrida y cínica. Esta diputada a todo el que se le acerca la remite con su secretario en cualquier petición y sí no es una persona que ella vea en las sedes del psuv unas cinco ó seis veces, no le presta atención. Es la diputada de los “papelitos que se pierden”, pero paga muy bien a quienes le hacen panfletos o propaganda contra la oposición e imperio, en eso gasta su presupuesto de ayuda al ciudadano o como ellos insisten en decirles “el pueblo”.
Son cientos las personas que entran en un lapso de meses de espera de ayuda de estos diputados, cacerías, etc., y a menos que se haga un boom informativo por las redes sociales o diarios dónde se puedan fotografiar por aportar, de resto nada conceden.