El índice de octanos,
llamado también octanaje,
indica la capacidad antidetonante del motor, dependiendo de la presión y la
temperatura a la que es sometido el carburante.
Es decir: a mayor índice de octanos, más comprensión
soporta la gasolina.
En
Venezuela el octanaje mínimo es de 91 y casi todos los
vehículos, por norma general, funcionan con gasolina de 95 (o verde). También
existe la gasolina de 98 (o roja), destinada a vehículos de alta gama y con
mayor potencia.
Utilizar una por debajo de
91 creará menos compresión, como por ejemplo la gasolina iraní que está entre 80 y 87 octanos, utilizada por
vehículos rurales de ese país.
Cuanto mayor sea el nivel
de octano, es menos probable que la combustión se produzca equivocadamente como
fue diseñado para producirse. Se sugiere revisar el manual del usuario o propietario de su vehículo y revisar los tipos
de gasolina sugeridos. También se encuentra dicha información en las calcomanías de los vehículos.
Es decir, el octanaje indica
la calidad del combustible. Y ahora que conoces la diferencia entre un
tipo y otro es fundamental.
El octanaje es una medida
de la calidad y capacidad de la gasolina para evitar las detonaciones y
explosiones en los motores.
Seguramente siempre te lo
has preguntado y quizás no sabías exactamente a qué te referías cuando hablabas
del octanaje de la gasolina. Por ello, te indicaremos cual es el
procedimiento mediante el cual se obtiene este elemento y su importancia dentro
del mantenimiento y cuidado de tu auto.
El octanaje es una escala
que mide la capacidad antidetonante del carburante (como la gasolina) cuando se
comprime dentro del cilindro de un motor. Para poder determinarlo, se
requiere efectuar la prueba en un motor especial de un solo cilindro, aumentando
de forma progresiva la compresión hasta que se manifiestan las detonaciones.
Luego de ello, se hace
funcionar el motor sin variar la compresión anterior, con una mezcla de
químicos llamados “iso-octano” y el “n-heptano”, que representará el octanaje o
índice de octano de la gasolina que se utilizó para esta prueba. Dicho más
fácil; se introducirá estos elementos para poder medir la calidad de la
gasolina.
Ahora que ya sabes qué es y cómo se mide el octanaje, vamos a un asunto más cotidiano y que tiene que ver con los problemas que se presentan al usar gasolinas con bajo número de octanos:
Por lo general, cuando se utiliza un combustible de estas
características se produce un mal funcionamiento, el motor sufre y no
rinde lo esperado, aparte de que se emiten gases contaminantes en una mayor
proporción.
Con el paso del tiempo y
el avance de la tecnología, se han desarrollado métodos para elevar el octanaje
de la gasolina, entre las cuales se encuentra la aplicación de nuevas
tecnologías de refinación, de reformado catalítico e isomerización, que
permiten obtener gasolinas con elevados números de octano limpios, es decir,
sin aditivos.
Finalmente, además de
indicar que la calidad de la gasolina depende en gran medida de la tecnología
utilizada en las refinerías, recomendamos desde aquí utilizar gasolinas de
buena calidad no solo con el fin de mejorar el desempeño de nuestro
automóvil sino también para cuidar el medio ambiente.
El octano más alto no
siempre da un mejor rendimiento. El rendimiento depende de la tecnología del motor, además de una serie
de otros factores bajo el capó.
El uso de una gasolina de
mayor octanaje no ayudará a limpiar su motor. A las empresas productoras de
gasolina como PDVSA se les requiere que tengan en sus productos aditivos o
detergentes de limpieza del motor, que pueden ayudar a prolongar la vida útil
de su vehículo.
Esto significa que el
motor puede limpiarse igualmente con 87 octanos como lo hará con 93 de octanaje
del combustible. Lo que se desconoce es sí la gasolina iraní que llegó a Venezuela posee dichos aditamentos,
gracias al sesgo informativo. Se planea mezclarla con la que se produce en el país, pese a las fallas de las refinerías, en El Palito, Cardón, Amuay.
La garantía de su vehículo
puede estipular qué gasolina que debe utilizar, ya que los daños a su vehículo
causados por el uso del tipo equivocado de combustible, no podrán ser
cubiertos.
Vale la pena hacer un chequeo mecánico regular si nota “golpeteos en el motor” o si la gasolina le dura menos. No por una solución o ahorro va a causar un daño a posteriori. Incluso hágalo si no presenta fallas, el chequeo del motor garantiza su seguridad al volante.