Vi hace poco una reunión de 6 chavistas donde uno leía un
comunicado oficial del psuv, entre lo que oí (descaradamente les espié y lo
confieso), está entre sus líneas decir que [Sic]"la oposición no tiene proyecto de gobierno, no posee ideas pero
posee las ganas de destruir todo lo logrado en este gobierno revolucionario,
aunado a ello el plan desestabilizador de cambiar a su candidato actual en las
próximas semanas". 1 de ellos comentó ¿en serio? ¡¡Sí camarada, así
es!!.
Esto es un plan extraño en el chavismo, ya que hace desconfiar
de la oposición pero al ver que no ocurre, les puede crear un efecto búmeran,
más cuando sabemos que Henrique Capriles Radonski no va a renunciar ni lo
renuncian, es el candidato opositor más sólido en esta época y hasta me atrevo a decir que mejor
aspectado ante los cacharros del siglo pasado.
En las próximas semanas
Capriles presentará su plan de empleo, económico y social en primera fase y que
promete desmontar cualquier matriz de opinión de los laboratorios de guerra
sucia ya que sabe muy bien que el dolor de los votantes es que le quiten sus
beneficios o no se los mantengan, cuando a la larga vemos que tales beneficios
son suspiros de desencanto.
Hace poco, el Exgobernador de Carabobo, Henrique Salas
Römer, decía que el comentario entre los rojos es que diosdado sería el
candidato. ¿Será? ¿No será? No lo sabemos, el puro deseo no empreña. Más esto nos
hace decirnos ¿quién es entonces el que se retira?.
Ante el error de Chávez en toda su carrera de no aupar una
línea sucesoria, porque él quiere el poder para siempre y no desea sombras, y
que en consecuencia no le da tiempo de hacer calar en las simpatías de sus
seguidores un nuevo nombre (porque en realidad todo su séquito inmediato no
tiene feeling), este fallo ayuda más a la muy unida oposición que al que salga
elegido de las filas del psuv –evidentemente a dedo-.
Con la declaración es misa –una de las ridiculeces que le
faltaban a chávez por hacer en su gusto de suplantar funciones- de que le
solicita a Cristo más vida, estoy seguro que viene un efecto dominó que será el
auto-empañamiento de su campaña, sea cual fuere el destino que Dios le signe. En
ello no opino, porque cuando no se tiene algo bueno qué decir, lo mejor es
callar. Dios nos juzgue, no los humanos en este caso.
Lo cierto para la oposición es que hay que ocuparse de
buscar los 2 votos y revisar con objetividad los planes que se propongan, para que
la crítica constructiva y el empuje le den la fortaleza que le borre cualquier
estigma de aquel bodrio llamado la "Tarjeta Mi Negra".
Mientras, que ellos se engañen
entre sí, más da tristeza que sean comunicados oficiales y palabras de batalla,
lucha y la mala idea de que no hay oro en esta patria que pueda ser Presidente
ni gente con más ánimos de hacer que de chistear y atacar, alejando la
inversión y minimizando la producción interna, más el sesgo discriminatorio.