Tantas necesidades de
siempre, quizá por ser sostén de hogar y no tener tanto espíritu viajero y
aventurero, me pasan factura en éstos momentos. Bueno, no sólo a mía sino a
todo un país que no se merece la desgracia de régimen que asola y desconcierta
cada día más, socavando las posibilidades de surgir, aunque sigamos luchando
por demostrarles lo contrario.
Bien, como dije en un
principio, siempre evité sacar el pasaporte venezolano ya que no disponía de
dinero para viajar y la presión psicológica y hasta legal de tener el pasaporte
y no usarlo era injusta para mí y una afrenta al tiempo de sacarlo y/o quitarle
chance a quien sí lo necesita o lo quiere para disponerse a viajar en el lapso
de tiempo que considere prudente o posible.
Cada vez el régimen
venezolano, desde antes de la llegada de Hugo Chávez, en sui período y en el
actual con nicolás maduro que lo ha empeorado y envilecido, el sacar un
pasaporte tenía sus molestias, tanto de colas, pernoctas, escasez de material,
quienes no lo retiraban y la muy mala atención en cada oficina, lo que parecía
ser “tradicional”. Eso también fue una sumatoria para que yo no me interesara
por hacer ese trámite.
Llegó el régimen ominoso
de nicolás maduro y adaptándose a algunos cambios mundiales, como el pasaporte
electrónico (que ya venía ejecutándose de cuando el anterior Presidente), más
las alianzas del ALBA y Mercosur y los permisos para usar nada más la cédula,
siempre pensándose en viajes turísticos, jamás en la masiva migración actual
que ha cambiado el panorama, aupado al cambio de visión de los países
integrantes (centro – derecha).
Como el pago del pasaporte
se hace con tarjeta de crédito, me ocupé de sacarla. La obtuve y…el monto de mi
crédito era insuficiente para el mismo. Y conseguir quien te preste la suya es
difícil, no porque mis amigos no tengan mejor crédito o no tengan buena
disposición, que la tienen, es que sucedía que los 2 amigos que me facilitaron
sus datos, el sistema no se las tomaba.
Bueno, pasó el tiempo y
por fin obtuve el crédito necesario para este trámite. Comenzaron los problemas
con el material, peleas con otros países, planes de frenar las oportunidades a
nuevas personas para que puedan conseguir un mejor futuro fuera, deseándoles
que se queden para un futuro más oscuro
cada día. Al fin dieron un chance en la oficina del Saime El Limón (Aragua) y
volví a hacer el trámite. Accedí hasta cierto punto de la página de registro,
hasta ese donde te solicitan los datos de la TDC. Me volvió a aparecer el
letrero que dice algo así como “su
tarjeta no puede ser procesada con el banco”, sin oportunidad de hacerlo
luego.
Estos intentos se hacían a
toda hora del día y de la noche. Hasta contraté a una persona que conoce y
seguía con el mismo problema. Se me habló de que se pagara con otra persona y
lo intenté pese a alto precio y la misma, no pudo acceder (¿?)
Lo dejé por la paz por
ello y eso se consolidó con el abismal y villanesco monto mal intencionado con
el que fue aumentado por el espurio régimen (Bs. 8.200) para primera vez, ergo,
más de 4 sueldos y medio (pronto se espera aumento del sueldo, lo que hará que
aumenten ilegalmente la Unidad Tributaria y esto aumentará por igual, lo que lo
hará más horrible).
Así, ¿cómo me saco el
pasaporte, llámese convencional o pasaporte express?
Hay personas que sí
pudieron registrar sus datos en el primer trimestre de 2018 y todavía esperan
turno nada más para validar huellas. Otros los sacaron y no les han llegado en
un año. Los que están por renovación también tienen problemas similares. Ergo,
es el sistema que no funciona, desde arriba quiero decir, desde Miraflores. O
sí funciona un plan para destruir lo que nos queda para seguir: la Fe y la
Esperanza.
Yo no pienso en emigrar,
como dije al principio no tengo alma viajera. Pero sí soy un ciudadano
venezolano aunque no se me cumplan mis derechos y yo sí cumpla mis deberes; soy
a su vez ciudadano del mundo. Quiero conocer México, Colombia, Perú. Ir con mis
conocimientos profesionales y trabajar un tiempito y ayudar a mi familia.
Quiero hacer todo legal, más estoy en un país con un sistema político
gobernante que hace que todo sea ilegal.
Doy gracias a los países
que han buscado mecanismos para ayudar a mis paisanos, así como presento
disculpas por todos los malos de aquí que les han llegado con –extrañamente-
pasaporte que nos les costó conseguir por ello, por ser malos y aupar a un
régimen del mal que les utiliza para que hagan daño, nos rayen y luego regresen
cómodos con el plan vuelta a la patria, sí les sirve de consuelo, esos
degenerados vienen a sufrir penurias acá y eso es un castigo por los actos
punibles o desagradables que acometen en otras tierras.
Dios me permita viajar
algún día. Dios nos permita tener a todos una Venezuela libre y buena para
producir, viajar y recibir al turismo y al necesitado con la misma buena fe y
ayuda de siempre que no estuvo el socialismo.
Lcdo. Argenis Serrano - @Periodistech
