Venezuela se encuentra en un momento crucial, con las elecciones
presidenciales del 28 de julio en el horizonte. La posibilidad de una
transición democrática se vislumbra y esto podría redefinir su futuro político.
Varios portales nacionales e internacionales, además de analistas políticos, económicos y sociales han realizado estudios de probables escenarios post electorales. Incluso el venezolano común vislumbra en base al comportamiento de los actores políticos y sus acólitos cómo podría desarrollarse todo.
He aquí algunos aspectos clave, recopilados de X, TikTok, consultas a expertos e incluso una consideración realizada por Copilot de Bing, bastante respetable en base a una recopilación de varios portales europeos, asiáticos y latonoamericanos:
Gobierno de Transición
Si la oposición logra derrotar a Maduro en las urnas y los resultados
son aceptados, se abrirá un nuevo escenario. El madurismo –otrora chavismo-deberá
negociar y respetar la voluntad de la mayoría; seguirá con fuerza, pero el
poder del ejecútese (ejecutivo), ya nos erá su potestad, así como la Fuerza
Armada.
La transición se basará en el pago de deudas, estabilización de la
economía, resolver crisis humanitaria y de servicios y despegar nexos oscuros
en negocios que afectan al país y abrirse a toda inversión extranjera,
incluyendo a China, Rusia, Irán, Turquía, pero sin opacidad.
Desafíos para la oposición
La estabilización de un gobierno de transición es crucial para
consolidar el proceso de cambio. Esto implica desarrollar la capacidad estatal
para atender las demandas de la población.
Lamentablemente el izquierdismo, dolido por la posible derrota, hará de
las suyas como ha intentado en Argentina ante un gobierno ideológicamente
contrario y el choque de ideas de regalarle a la ciudadanía los recursos versus
crear los espacios sólidos para que la ciudadanía sea creadora de sus propios
recursos.
Escenarios
Además de la transición, existen otros escenarios posibles en los seis meses
entre las elecciones y la toma de posesión, ya sea la renuncia de nicolás maduro
para acelerar el proceso o accionares oscuros de parte de grupos políticos,
económicos o armados para seguir pescando en río revuelto.
La determinación y organización de las bases opositoras serán determinantes
en este proceso, además de incluir como mediadores a factores del chavismo
disidente y a los gobernadores y alcaldes del psuv, que bien saben que se
acercan las elecciones regionales y de su proceder provendrá su continuidad o
no, ya sin el portaaviones del partido de gobierno.
Queda claro que la situación en Venezuela es compleja, pero la esperanza
de una transición hacia la democracia sigue latente.
Otros escenarios post elecciones
Continuidad del oficialismo actual
Una de las perspectivas posibles tras las elecciones en Venezuela es que
el oficialismo logre mantener el poder y continúe con su agenda política
actual.
Diálogo y reconciliación
Existe la posibilidad de que las elecciones sean el punto de partida
para un proceso de diálogo y reconciliación entre las fuerzas políticas en
Venezuela (y sus bases), buscando superar la polarización y trabajar juntos por
el bienestar de la nación.
Este escenario es utópico, pero no del todo, ya que la necesidad de
mediar es imperativa para reconstruir a un país psicoanímicamente afectado,
casi a la par de lo económico y estructural.
Crisis institucional
Si los resultados de las elecciones son cuestionados y no se logra un
consenso sobre su legitimidad, Venezuela podría enfrentar una crisis
institucional que agudice la inestabilidad política y social.
Presión internacional
Dependiendo de cómo se desarrollen las elecciones y se manejen sus
resultados, Venezuela podría verse sometida a una mayor presión por parte de la
comunidad internacional, con posibles sanciones y medidas coercitivas.
Porque las sanciones, cuestionamientos o mal llamado bloqueo son
personales, pero los receptores lo que han hecho es transpolar a la población
nacional y dice que son otros los culpables, lo que enerva a quienes entienden
el engaño, siguiendo la polémica y división nacional.
De haber unas elecciones medianamente tolerables, todas las restricciones
de fuera se borrarán, gane quien gane, esperando que desde aquí sean recíprocos
sin las condiciones o cuestionamientos de estar juzgando y atacando a otros
países de manera enfermiza (molinos de viento), para ocultar sus propios
errores.
Emergencia humanitaria
En caso de que las elecciones no conduzcan a mejoras sustanciales en la
situación económica y social del país, Venezuela podría verse enfrentada a una
prolongación de la crisis humanitaria que afecta a su población.
Esto podría no ser tanto así, mientras se mantenga el permiso de porte y
uso de dólares (ya que es falso que exista dolarización en Venezuela); además,
hay grupos de poder del Medio Oriente y Asia, que no permitirían ello suceda y
no por los venezolanos, sino por las grandes inversiones que aquí han hecho y
la presión que han ejercido en el gobierno de turno, lo que ellos llaman
“alianzas”, sin contar las enormes deudas que Miraflores ha acumulado y que se
deben pagar con espacios y reinversión extranjera que “se cobra y se da el
vuelto”, sin que las arcas de la nación se vean favorecidas,
Reformas electorales
Las elecciones podrían ser el catalizador para la implementación de reformas
en el sistema electoral venezolano, con el fin de fortalecer la transparencia y
la confiabilidad de los procesos electorales en el futuro.
Inestabilidad política
Si las elecciones no logran resolver las tensiones políticas existentes
en Venezuela, el país podría enfrentarse a un escenario de inestabilidad
prolongada que afecte su gobernabilidad y estabilidad.
Incremento de la migración
Dependiendo de los resultados electorales y de la situación interna del
país, es posible que se produzca un aumento en la migración de venezolanos en
busca de oportunidades y condiciones de vida mejores en el extranjero.
Reconfiguración del panorama político
Las elecciones podrían dar lugar a una reconfiguración del mapa político
en Venezuela, con la emergencia de nuevas fuerzas y actores que influyan en la
dinámica política nacional.
Estas son solo algunas de las perspectivas y escenarios posibles tras
las elecciones en Venezuela, que dependerán en gran medida de los resultados
electorales, la respuesta de los actores políticos y sociales, y la
intervención de la comunidad internacional.