Puede tener todo el alto costo que usted imagine, pero un vehículo sigue siendo el sueño de muchos, pero no todos lo internalizan como un bien a cuidar y querer, salvo que esté nuevo y se utilice para “lucirse”, creando un status social que puede ser o no apegado a la realidad.
La conducción de todo vehículo debe ser sentida y pensada.
Su cuidado debe ser integral para que rinda y que se minimicen el número de
fallas mecánicas que hagan pasar malos momentos y para que además, se conserve
la belleza del mismo sea cual sea su tiempo.
¿Cree que sólo con reconstrucciones se recuperan los
vehículos “vintage” o coleccionables que hay por las calles?, no, es el valor
agregado, que sobrepasa al dinero y se transforma en compenetración propietario
– familia y vehículo.
Eso es un algo que se debe sentir para comprenderse. Claro,
si quiere un nuevo vehículo y su lucha y presupuesto lo permiten, es un paso
hacia adelante, mismo que es conservarlo al día, toda su vida. El privilegio de
tenerlo siempre será el mismo aunque sea en lo rutinario.
Cosas menudas para disfrutar más y mejor de su vehículo
Siempre existirá un vecino que requiere ir al mismo o
cercano punto al que usted va temprano en la mañana, ¿Por qué negarle la ventaja
del uso del vehículo?, ¿Por no darle para la gasolina o mal acostumbrarle?
¡Estamos seguros que usted es mejor que esas nimiedades!
En todos los países del mundo se permite comerse una luz roja del semáforo, por medidas de
seguridad. Pero en el día, aunque la calle esté sola y usted retardado, no es
válido, legal ni justo. Tiende a dar acelerones al carro que dañan las correas,
válvulas, cauchos, frenos y principalmente ponen
en riesgo la vida de peatones, otros conductores y la de usted.
Lavar el vehículo en casa, parece una buena idea, de esas
que ayudan a ahorrar dinero y dan
qué hacer. Una vez cada lejano tiempo, vale, pero eso debe hacerlo un equipo
profesional.
De esta manera no dañará el motor con sustancias
indebidas, sabrá sí hay que cambiar o no el filtro de aire, el agua no se quedará en los asientos,
pudriéndolos, tapetes húmedos y mal olientes que se llenan de hongos y
bacterias creando infecciones respiratorias, afecciones en piel y mucosas. En fin, lo que supuestamente ahorró,
le saldrá costoso en salud y recuperación del automóvil.
Únase a clubes de conductores de la marca de su vehículo.
Allí le recomendarán los mejores precios en repuestos, qué derivados del petróleo
utilizar, novedades, lugares para el lavado
de su vehículo que sean fiables, así como servicio técnico y accesorios.
Tenga siempre preparada una ruta de ida y venida, en
especial cuando haga viajes de placer o negocios fuera de su área regular. No es
sólo leer el Google Maps, sino
saberlo hacer con tiempo, tenerlo en su teléfono con la ruta o llevarlo a papel
con referencias. Mejora sus tiempos y además no pone en riesgo su vida ni que
le roben el vehículo.
Usted puede ser el adulto que es, pero nunca sobrará la prudencia
de avisar para dónde va, dónde está, con quién está y qué cambios de planes y
ruta realizará.
Los viajes al llano, la playa, orillas de río, vías
rurales, llenan de fango, salitre, agua y demás, partes de su vehículo que
usted no detalla que se deben limpiar o reparar (pulimentos especiales).
Sencillo consejo final
Con los vehículos sucede similar como con su salud: Se
deben mantener cuidados cuando están al 100% para que en caso de enfermedad (avería
o problemas de su superficie en carrocería,
cauchos, tapicería), su recuperación sea óptima con el trato adecuado, brindado
por quienes saben y siempre auspiciado por usted.
Fuente: http://lavaderodecarroscali.co/