No
vamos a examinar corazones ni vidas, sólo nos guiaremos por lo que ya se ha
visto de manera recurrente y es una frecuente significativa, aunque quizá
negativa: Una herencia de familia,
que no ha sido realmente concertada en la distribución equitativa, termina
generando problemas (peleas, riñas, incluso muertes), que no deberían ser. La
ley tuvo que generar la figura de proindiviso vivienda para poder mediar de manera eficaz, equitativa y justa entre los
herederos, sin derecho a chistar.
Para
no llegar al mismo, cada quien debe cuidar sus propias vidas y no esperar la muerte
del padre o madre para ganar un dinero extra. Porque así como no supo generar
antes de dicho fallecimiento, cuando reciba su parte de la herencia de familia,
tampoco lo sabrá administrar y volverá a la misma miseria.
La tabla de salvación para repartir una herencia de familia: El Proindiviso
La
expresión jurídica "proindiviso" se refiere al derecho de propiedad
sobre un bien; esto quiere decir que una persona ostenta el derecho de
propiedad sobre ese bien sólo parcialmente puesto que comparte la titularidad
con otras personas, en este caso, los hermanos y/o hijos, aunque en otros casos
se entremezcla entre tíos, tías, hermanos y primos.
Dicho
de otra forma, el proindiviso es un término legal que se refiere a la situación
en la que 2 o más personas comparten la propiedad de un bien en común, sin que éste
se divida en partes físicas distintas. De esta forma, cada propietario tiene
una parte indivisa del bien en cuestión, la cual es dividida de manera
equitativa por el juez en base a lo determinado por los peritos de avalúos y no
por la mera conveniencia de las personas involucradas.
Es
así como la herencia de familia no es decidida por aquello de “yo soy el
hermano mayor y me toca…” o, “yo soy la menor de la familia (la benjamín) y por
ende me toca más o me toca todo”, situaciones que se han presentado a la hora
de la repartición de una casa, finca, terreno o empresa que resulta ser la herencia
de familia, dejada por los padres o un familiar a cierto sector de su familia.
Importancia del Proindiviso
Radica
en la posibilidad de que varias personas puedan adquirir y poseer un bien en
conjunto, lo que puede ser beneficioso en situaciones como la compra de una
propiedad entre varios socios o familiares. Además, el proindiviso permite la
diversificación de la inversión y la distribución de responsabilidades y costos
entre los copropietarios.
Para
evitar problemas, es importante establecer claramente las normas de uso y
gestión de la propiedad en un acuerdo de proindiviso, con la presencia de un
abogado especialista en la materia.
Algunos
problemas que el proindiviso ayuda a solucionar incluyen la división de gastos
y responsabilidades entre los copropietarios, la gestión compartida de la
propiedad y la posibilidad de evitar conflictos en caso de herencias o
transmisiones de bienes.
Reiteramos
que en caso de conflictos en una situación de proindiviso, es fundamental la
comunicación abierta y la búsqueda de soluciones consensuadas entre los
copropietarios, incluso con asistencia legal (que no tiene la intención de
armar discordia dando más bienes a favor de alguien).
Los
profesionales que pueden atender situaciones de proindiviso para una herencia
de familia incluyen abogados especializados en derecho de propiedad, notarios,
mediadores y gestores inmobiliarios.
Beneficios del proindiviso en una herencia de familia
Inversión compartida: Permite que varios miembros de la familia contribuyan económicamente a la adquisición de un bien inmueble u otro tipo de propiedad, lo que facilita la compra de un bien más grande o costoso sin que cada miembro tenga que asumir el total del costo. Esto es lo que han hecho nuestros padres y lo que en los actuales momentos, hacen las parejas en comunidad, debido a los altos precios en el sector inmobiliario.
Distribución de responsabilidades y
costos: Al compartir la propiedad del bien, los
copropietarios pueden distribuir equitativamente las responsabilidades
financieras, los gastos de mantenimiento, reparaciones y otros costos asociados
con la propiedad que es herencia de familia.
Uso compartido: El proindiviso permite que diferentes miembros de la familia puedan utilizar el bien de forma rotativa o compartida, lo que puede resultar beneficioso en casos de segundas residencias, propiedades vacacionales o bienes que no se utilizan a diario.
Herencia de familia facilitada: En caso de fallecimiento de uno de los copropietarios, la parte indivisa de la propiedad puede ser heredada por los demás miembros de la familia de forma más sencilla que si la propiedad estuviera a nombre de una sola persona.
Unión familiar:
La propiedad compartida puede fortalecer los lazos familiares al promover
decisiones consensuadas, comunicación abierta y cooperación entre los miembros
de la familia involucrados en el proindiviso. Muy distinto a la espera del
fallecimiento de uno o más miembros para apoderarse de ello o venderlo (incluso
de manera ilegal).
Por lo tanto, el proindiviso es la mejor manera de velar por una herencia de familia
Es
una opción beneficiosa para las familias que desean adquirir y poseer un bien
en común, ya que les permite compartir el costo, la responsabilidad y el uso de
la propiedad de manera colaborativa y equitativa. Incluso para cuidar o mejor
distribuir aquellos bienes que los padres generaron, sin favoritismos ni esa
falsa creencia de que mientras más inviertas en la propiedad, más te toca o por
haber cuidado a los padres, eres más hermano y mejor hijo.
Dichos
detalles son válidos, pero para una evaluación moral entre los familiares, no
ante las leyes. Para ello, se sugiere tratar con terapeutas, de esa forma cada
quien hará un análisis de actitudes y aptitudes y podrá otorgar mayores
beneficios a quienes más aportaron a la propiedad.
Es
un asunto mucho más moral y de real vínculo familiar, que legal. Para todo lo
demás, existe el proindiviso.