Comentario de Periodistech: Más de un año y medio que está el COVID-19 mejor conocido como coronavirus chino y con variantes inglesa y brasileña azotando al mundo y aún millones siguen sin aprender la lección, todo por el “no vale, yo no creo”; pero cuando les toca directa o indirectamente, otro es el cantar.
Gente protestando porque
no quiere usar mascarilla. Los que la usan dejándose la nariz por fuera, los
que se la quitan para hablar con otros o peor aún, para estornudar y toser (lo
he visto en muchas ocasiones), los que usan mascarillas que son en absoluto
absurdas en tamaño y hasta en el material.
Se molestan sí les toman
la temperatura o les colocan gel; sí hay plásticos protectores o si les piden
documentos que demuestren su salud. La COVID 19 ha demostrado el egocentrismo e
indiferencia de muchos que parecen ser más incidentes que los que nos cuidamos
y cuidamos a los demás.
La Organización Mundial de la Salud, pese a haber politizado, ocultar
responsabilidades, estar demasiado confundida, experimentando y amparando
errores y gobiernos recalcitrantes como el de China, sigue aupando a la higiene
y el control para mantener al virus a raya. ¿Ha funcionado?, pues eso lo debe
decir usted en sus niveles de salud personal, familiar y vecinal / laboral en
el último año.
Los gobiernos han hecho lo
que han podido y otros lo que han querido. Pero ninguno puede jactarse, porque
hasta en los que menos caso hubo como Taiwán o Finlandia, la incidencia estuvo.
No contamos a Corea del Norte porque de allí sólo salen mentiras y atrocidades
propias de la dominación del hombre por el hombre.
Queda pues el seguirse
cuidando, no debe esperar a que alguien
que conoce sufra y fallezca de COVID-19 para cambiar.
Yo he vivido de cerca ya
13 casos y me duelen. Y varios de ellos se extra cuidaron, pero el destino es
así cuando de la muerte se trata; pero el cómo sea la vida y nuestro fin sí
podemos darle mejor forma y morir por coronavirus chino no es lo que usted o yo
merecemos.
Mientras más nos cuidemos,
menos vidas le daremos en sacrificio al COVID-19. Seamos el balance con nuestra
precaución. Y no minimicen las cosas pequeñas, especialmente cuando esta no es
mínima, sino la más grande tragedia en
casi un siglo.
Esperemos que los censores
de las redes no desestimen el valor humanístico, educativo y periodístico de
este artículo.
NO
DESESTIMEN JAMÁS al COVID-19, coronavirus chino y sus distintas cepas.
¿Qué es la COVID-19?
Conocemos como Covid-19 a la enfermedad que
está provocada por una nueva variedad del coronavirus, que recibe el nombre
de SARS-COV-2. La primera vez que se tuvo constancia de esta
enfermedad fue el pasado 31 de diciembre de 2019 en la ciudad de Wuhan, en
China. Desde entonces, el avance del Covid19 en todo el mundo ha sido una
realidad hasta convertirse en una pandemia.
Síntomas del Covid-19
Estamos ante una enfermedad que cuenta con una amplia
variedad de síntomas, aunque también hay que destacar que son muchas las
personas que desarrollan esta enfermedad y que no presentan síntomas o que
estos son muy leves. Por norma general, los síntomas más habituales del Covid-19
son fiebre, tos seca y cansancio. Hay que hablar también de otros síntomas
que son bastante recurrentes como la pérdida del gusto y del olfato, dolor de
garganta, diarrea, congestión nasal, erupciones cutáneas o nauseas.
Esta enfermedad cuenta además con una serie de síntomas que se asociarían a un
cuadro grave de Covid-19 y en este caso sería imprescindible la atención
inmediata de especialistas. La disnea o dificultad para
respirar, confusión, opresión en el pecho o fiebre alta (por encima
de los 38º) son algunos de estos síntomas.
Por otro lado, la aparición de los síntomas de la enfermedad suele
aparecer entre los 5 y 7 días después del contagio, aunque la cifra puede
variar entre 1 y 14 días (por ello se recomienda evitar el contacto con otras
personas durante dos semanas en caso de que hayamos desarrollado la enfermedad
o si hemos tenido contacto estrecho con alguien que ha sido contagiado por la
Covid-19).
He contraído Covid-19, ¿Qué me puede suceder?
Debido al impacto que está teniendo esta enfermedad a
nivel mundial no es de extrañar que sean muchas las personas que tienen pánico
a la Covid-19. Pero... ¿qué es lo que me ocurre si doy positivo en la
enfermedad? En primer lugar, debes estar tranquilo dado que se estima que el
80% de los casos positivos se recuperan sin necesidad de recibir tratamiento
hospitalario.
Por su parte, el 15% de los enfermos desarrollan una
enfermedad grave, como por ejemplo una neumonía, que requerirá la atención de
los especialistas mientras que el 5% restante tendrá un cuadro crítico que
podría llegar a causar la muerte del paciente. Es importante aclarar que
estamos ante una enfermedad que causa más problemas en pacientes de
avanzada edad, así como a aquellos que cuenten con patologías anteriores, como
por ejemplo problemas en el corazón, hipertensión arterial, cáncer, obesidad,
etc. Es decir, la mortalidad en pacientes menores de 40 años es ínfima, sin
embargo, este porcentaje aumenta sensiblemente en aquellos pacientes que
cuentan con más de 75 años. Otro detalle importante que está directamente
relacionada con impacto del Covid-19 entre los pacientes es la calidad de
los servicios de salud y hospitalarios.
¿Cuenta la Covid-19 con efectos a largo plazo?
Dado que estamos hablando de una enfermedad
relativamente reciente, tanto los estudios como las investigaciones
relacionadas con los efectos de la Covid-19 no son demasiado concluyentes. Sí
que hay que hablar de una serie de efectos que pueden aparecer en aquellas
personas que han padecido esta enfermedad, siendo la fatiga o diversos síntomas
respiratorios algunos de los efectos más representativos.
Además, hay que hablar del impacto emocional que deja esta enfermedad, de modo
que la ansiedad y la depresión son otros de los efectos que pueden aparecer en
pacientes que han desarrollado la Covid-19.
Sea como sea, necesitaremos que transcurra un tiempo para poder determinar los
efectos a largo plazo que causa esta patología.
¿Cómo podemos protegernos de la Covid-19?
La prevención de la Covid-19 consta de una serie de
acciones que nos serán de gran utilidad. Lavarse las manos o el uso de
mascarilla son algunos de los mejores ejemplos de técnicas de prevención
para evitar esta patología. Hay que hablar también de la importancia de evitar
las aglomeraciones de gente (especialmente en espacios cerrados). De todos
modos, a día de hoy ya contamos con diversas vacunas contra la Covid-19, siendo
una de las mejores alternativas que tenemos a nuestra disposición.
¿Existen vacunas contra la Covid-19?
Sí. Desde hace un tiempo tenemos la posibilidad de
vacunarnos contra esta enfermedad. En concreto hay que hablar de la existencia
de tres vacunas que han sido autorizadas por los organismos de reglamentación
nacionales. Las variedades que existen en la actualidad son Pfizer, Moderna y AstraZeneca, que nos
ofrecen un elevado porcentaje de éxito. De todos modos, al igual que sucede con
la enfermedad, es necesario seguir investigando acerca de la eficacia de las
vacunas y se espera que 2021 sea un año clave para conseguir grandes avances
con las vacunas.
Las
vacunas china y rusa no han tenido evaluación por parte de la
OMS ni grupos científicos, pero se ha comercializado en países de regímenes o
gobiernos izquierdistas gracias a sus ideologías donde han estado jugando con
las personas. No se puede decir que han tenido efectos colaterales ya que es
información que ocultan o porque quizá no son más que placebos reconfortantes o
su efecto médico se del control de la gripe común.
Lo cierto es que vacunarse es lo debido, aunque lo
mismo sea una lotería y no nos hace inmunes, sólo nos cuida, eso no es un
antídoto como el de mordedura de serpiente.
¿Cómo es la prueba de la Covid-19?
Para determinar si un paciente ha contraído esta
enfermedad existen diferentes pruebas que nos confirmarán la infección.
La opción más utilizada es conocida con el nombre
de PCR y consiste en la búsqueda de pruebas moleculares que se
obtienen en la nariz o en la garganta a través de un hisopo. Además, hay que
hablar de los análisis de sangre o saliva como otras de las alternativas que
tenemos a nuestra disposición para determinar si un paciente está afectado por
la Covid-19.
China desarrolló el hisopado rectal que es altamente
más incómodo que el anterior pero quizá pueda ayudar intimidando a los reacios
a cuidarse, para que lo hagan y minimicen el llegar a tan penosa prueba.
En definitiva, Covid-19 es una enfermedad que ha
causado un gran impacto en la sociedad actual y se espera que sus efectos sigan
presentes en los próximos años. No hay que olvidar que debido a esta enfermedad
son muchos los países y regiones que han tenido que declarar importantes
medidas de prevención (como el confinamiento o “toque de queda”) por lo que la
economía, a nivel mundial, también se ha visto afectada. De todos modos, a
medida que van pasando los meses no solamente tenemos más información acerca de
esta patología, sino que también contamos con más recursos y técnicas de
prevención que nos serán de gran ayuda y utilidad para erradicar, o como mínimo
controlar, esta enfermedad.
Hasta la fecha (marzo 2021), la Covid-19 ha
contagiado a más de 120 millones de personas en todo el mundo y ha causado
la muerte de, aproximadamente, tres millones de personas, siendo Brasil,
Estados Unidos o la India algunos de los países más afectados por la Covid-19.
